Mirando la biografía de esta banda valenciana he podido leer que sus primeros pasos se dieron a comienzos de los 90, haciendo al principio versiones de otros grupos, aunque no fue hasta el año 1998 cuando se conformaron oficialmente como DRUEIDA. En cualquier caso se trata ya de un buen puñado de años que los convierte en veteranos, pese a que su actividad no ha sido especialmente intensa durante este largo tiempo. En 2003 graban sus primeras demos, y un año más tarde su EP "El Brebaje”, que daría paso años más tarde a un primer larga duración titulado “Into The House Of Evil”, autoeditado a través del sello Maldito Records en 2008. A lo largo de este tiempo la banda ha sufrido algún cambio, y también se ha ido curtiendo en los escenarios, llegando así a su segundo álbum, que es el que nos ocupa, con una importante experiencia y solidez musical.
“Collateral Damage” es el nombre de este nuevo asalto de DRUEIDA, un trabajo que se grabó entre los Fireworks Estudios de Massanassa (Valéncia), para las voces y batería, y el Drueida Studio, donde se grabó la guitarra y el bajo, además de las mezclas y la postproducción; para la masterización se fueron a los Estudios M-20. Así es como se forja esta colección de temas que tienen el Heavy Metal como seña de identidad, con un discurso tradicional que no olvida la fuerza ni la oscuridad en su sonido, aunque llevándolo todo a su terreno para intentar ofrecer una visión algo más personal de este tipo de música. El resultado es un disco muy potente en el que los riffs sacan toda su garra junto a una base contundente, mientras la voz desgrana los textos con la fuerza y agresividad más metalera. Unas letras que, por cierto, vienen en inglés, potenciando un poco más el sonido y maneras tópicas del estilo.
No se puede decir que la propuesta de DRUEIDA busque sorprender con material novedoso dentro del Metal, de hecho son fundamentalmente una banda orientada hacia el rollo clásico, tal vez con algo de la frescura que tiene el grabar en tiempos modernos. Esto hace inevitables las comparaciones con grandes nombres de toda la vida, me vienen a la mente JUDAS PRIEST por ejemplo, con lo que superar el listón es francamente difícil, especialmente a la hora de componer temas con el gancho de los clásicos. En cualquier caso “Collateral Damage” es una obra muy cañera y digna de ser escuchada por el público ansioso de Heavy Metal, de modo que si esto es lo tuyo no dejes de dar una escucha a este disco que nos presenta el sello The Fish Factory.
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