Mucha atención al nuevo trabajo de los canadienses GET THE SHOT, pues es uno de esos álbumes que quitan el hipo. Auténtica brutalidad a base de Hardcore y Metal que se reparte a lo largo de once cortes, si bien es cierto que para terminar han incluido un tema más calmado. Se trata de “Merciless Destruction” y supongo que con una portada como la que luce el disco y un título así no hará falta que subrayar que, en términos generales, estamos ante una obra inmisericorde y contundente como pocas, de esas que te hacer hervir la sangre y disparan tu adrenalina hasta niveles máximos. Además hay que añadir que el sonido es impresionante, nítido y poderoso a partes iguales, lo que hace que el rollo contemporáneo de raíces clásicas de estos tipos gane más fuerza, si cabe.
Al tener “Merciless Destruction” entre las manos en cualquiera de sus soportes físicos (CD, vinilo) uno se queda atrapado mirando los detalles de la brutal ilustración que luce la cubierta, aunque en cuanto empieza a sonar el primer tema toda la atención se dirige hacia la música. Y es que GET THE SHOT no se andan con tonterías, van directos a la yugular con una mezcla perfectamente equilibrada de Hardcore y Metal, si bien es cierto que la actitud del grupo tira más hacia la primera etiqueta que hacia la segunda. No obstante esta gente ha compartido escenario con bandas de Death Metal y se nota que tienen tendencias hacia la máxima agresión sonora, sin olvidar que su rollo está en la misma onda que grupos como HATEBREED, MALEVOLENCE, NASTY, LIONHEART, TERROR… de hecho suenan bastante parecido a estos grupos. Puede que la innovación y la originalidad no sean exactamente su fuerte, pero cuando compruebas a todo volumen lo que son capaces de hacer estos canadienses no tienes más remedio que rendirte ante las evidencias.
Además de una estética cuidada y un gran sonido GET THE SHOT también han querido dejar claras algunas de sus ideas e inquietudes en el álbum, con reflexiones filosóficas que remiten a Theodor Adorno, Thomas Hobbes y Arthur Schopenhauer, pero que se materializan en temas feroces en los que nos recuerdan que vivimos en un mundo duro en el que hay que luchar para sobrevivir. Un trabajo interesante además de brutal, de esos que cualquier seguidor del Hardcore actual, y de vieja escuela, puede escuchar sin problemas, y que seguro llamará la atención del público acostumbrado al Death Metal y el Beatdown. Eso sí, la banda no ha tenido ningún complejo en terminar con un tema como “Season of the Damned II”, en la que muestran una cara bastante más sosegada y accesible, casi como si de una balada se tratara. Un descanso para los oídos tras la apabullante descarga que predomina en “Merciless Destruction”.
https://www.facebook.com/gettheshothc
https://www.gettheshothc.com
Al tener “Merciless Destruction” entre las manos en cualquiera de sus soportes físicos (CD, vinilo) uno se queda atrapado mirando los detalles de la brutal ilustración que luce la cubierta, aunque en cuanto empieza a sonar el primer tema toda la atención se dirige hacia la música. Y es que GET THE SHOT no se andan con tonterías, van directos a la yugular con una mezcla perfectamente equilibrada de Hardcore y Metal, si bien es cierto que la actitud del grupo tira más hacia la primera etiqueta que hacia la segunda. No obstante esta gente ha compartido escenario con bandas de Death Metal y se nota que tienen tendencias hacia la máxima agresión sonora, sin olvidar que su rollo está en la misma onda que grupos como HATEBREED, MALEVOLENCE, NASTY, LIONHEART, TERROR… de hecho suenan bastante parecido a estos grupos. Puede que la innovación y la originalidad no sean exactamente su fuerte, pero cuando compruebas a todo volumen lo que son capaces de hacer estos canadienses no tienes más remedio que rendirte ante las evidencias.
Además de una estética cuidada y un gran sonido GET THE SHOT también han querido dejar claras algunas de sus ideas e inquietudes en el álbum, con reflexiones filosóficas que remiten a Theodor Adorno, Thomas Hobbes y Arthur Schopenhauer, pero que se materializan en temas feroces en los que nos recuerdan que vivimos en un mundo duro en el que hay que luchar para sobrevivir. Un trabajo interesante además de brutal, de esos que cualquier seguidor del Hardcore actual, y de vieja escuela, puede escuchar sin problemas, y que seguro llamará la atención del público acostumbrado al Death Metal y el Beatdown. Eso sí, la banda no ha tenido ningún complejo en terminar con un tema como “Season of the Damned II”, en la que muestran una cara bastante más sosegada y accesible, casi como si de una balada se tratara. Un descanso para los oídos tras la apabullante descarga que predomina en “Merciless Destruction”.
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